Pues el pecado de un solo hombre, Adán, hizo que la muerte reinara sobre muchos; pero aún más grande es la gracia maravillosa de Dios y el regalo de su justicia, porque todos los que lo reciben vivirán en victoria sobre el pecado y la muerte por medio de un solo hombre, Jesucristo. Rom. 5:17 NTV
Entramos al tema que todos y a la vez ninguno queríamos tocar, al tema de la Guerra Espiritual. Te guste o no, al haberte convertido en Hijo de Dios entraste a un campo de batalla al que estarás sujeto hasta el día que te vayas a vivir con tu Padre Celestial.
Esto no quiere decir que los que no han nacido de nuevo estén a salvo. El enemigo de Dios odia a toda la raza humana, salvos o no salvos, pues él, aún con todo y la perfección con la que fue creado, no fue creado como Dios, a su imagen y semejanza y nosotros lo fuimos. Somos el objeto del Amor de Dios y así es como se venga de Dios.
Mas él anhelaba el lugar de los Hijos de Dios, el cual es un lugar de reinado y de poder que él codiciaba, (Isaias 14:14) por lo mismo, si no puede impedir que nazcas de nuevo, su objetivo es impedirte que reines.
Existe la idea de que todos somos hijos de Dios, más la Biblia es clara al respecto:
A todos los que la recibieron, a los que creen en su nombre, les dio la potestad de ser hechos hijos de Dios; Juan 1:12
El no nacido de nuevo es su esclavo, por tanto él no se molesta en perseguirlos como nos persigue a nosotros. A ellos no puede matarlos, ellos ya están muertos, (Col. 2:13) por tanto lo más que puede hacer contra ellos es impedirles que reciban su redención, para poder seguir usándolos como armas de destrucción, contra los demás o contra si mismos, sin que ellos lo puedan evitar, por lo mismo no representan ninguna amenaza para él, mas nosotros si.
No obstante, el sabe que no todos los Hijos de Dios viven como tales; el sabe que muchos de ellos no conocen su verdadera identidad, ni cual es su herencia comprada con sangre; muchos otros reciben su salvación por no ir al infierno, pero no les interesa conocer al que se las dio; muchos lo conocen a través de las imágenes distorcionadas que la religión presenta, sin saber en realidad quien es su Padre o experimentar su amor y de eso se vale el diablo para despojarlos, usando enfermedad, problemas, dañando sus relaciones personales, maritales, o atacando nuestras finanzas.
Jesús nos previno que tendríamos estas aflicciones, mas esto se supone que sería solo “por un instante” (2 Cor. 4:17). Sin embargo muchos Hijos de Dios se han resignado a vivir en continua aflicción como estado permanente, mas en los siguientes mensajes tendré la oportunidad de mostrarte que esto es un mal entendido y te darás cuenta que ésto era solo una advertencia y no una sentencia. El plan de Dios no es derrota permanente.
Jesús nos dijo “Confia en mi, yo he vencido al mundo”. (Juan 16:33) Él quiere que tú sepas 
que El no está detrás de estos ataques, para que puedas pelear contra ello. Por lo mismo la fe que tengas será muy importante. Si tú crees que estas cosas vienen de Él, no usarás tu fe para resistir sus ataques y v vencer sobre ellos.
La estrategia del enemigo radica en su boca, a través de la mentira. El trata de evitar a toda costa que la gente crea en el único camino para la salvación, que es el Evangelio de Gracia de nuestro Señor Jesucristo; es por ello que existen tantas religiones y tantos “evangelios”.
Cuando no puede impedirlo, tratará de neutralizarte para que tu testimonio no tenga poder ni influencia sobre los demás
Sus engaños son incontables más no diferentes de los que uso desde el principio, por mencionar unos cuantos
”
- ¿De verdad Dios dijo? Si de verdad es…….” = Dios miente
En el jardín del Edén, con Eva (Gen 3:1-4); En el desierto con Jesús Mat. 4:1-11; En el mundo, en la vida diaria:
¿De verdad Dios dijo que la familia es necesaria? que los niños necesitan de ambos padres? Que los fetos son humanos? Que el hombre no es un animal? Que el mundo fue creado?
¿De verdad Dios dijo que el matrimonio/el sexo es entre un hombre y una mujer?
¿De verdad Dios dijo que solo creyendo puedes ser salvo?
¿De verdad Dios dijo que hay un solo camino a Él?
¿De verdad Dios dijo que la sangre de Cristo es suficiente?
¿De verdad Dios dijo que sin El nada puedes hacer?
¿De verdad Dios dijo que te ama, si asi fuera….? Deut. 1:27; 9:28
¿De verdad crees que Dios ya te perdono todo? solo el sabe….
¿De verdad eres cristiano? Si asi fuera…
¿De verdad crees que Dios existe?
Etc. Etc. Etc.
Por lo anterior es importante que aprendas a reconocer sus mentiras, poniendo tu enfoque en lo que Dios dice en su Palabra y que sepas que Jesús nos muestra en la misma cómo ganar y vivir victorioso.
En las siguientes semanas aprenderemos juntos como ganar esta batalla, y si has estado conmigo a lo largo de esta publicación, algunas de estas estrategias ya no serán nuevas para ti, recuerda que escondido en Cristo, cubierto con el oro de su rectitud, Él no puede devorarte fácilmente.
Si tienes oportunidad, por favor lee el Capítulo 4 de Santiago y el capítulo 5 de la primera carta de Pedro , pidiendo a Dios revelación. En esta revelación está la clave de tu victoria.
Shalom
