- La Vara de la Disciplina
- Gracia para Nuestros Hijos
- La Punta del Iceberg
- Afirmando a Nuestros Hijos.
- Instruye al Niño en Su Camino
- En Nuestra Debilidad El Es Fuerte
- Padre, Madre, ¡No Estas Sólo!
- Secretos para Padres
- Libertando Libertadores
- Herencia del Señor son los Hijos
- Largura de Días
- La Guiansa de Los Hijos
- La Generación del Apocalipsis
Gracias por permitirme compartir lo que el Señor puso en mi corazón, con el fin de ministrar a nuestra generación con la vida de Cristo, en un mundo donde aun nuestra cultura es de muerte. Recapitulando, aprendimos que para ministrar a un adolescente para vida y no para muerte, necesitamos:
- Entender el Nuevo Pacto
- Que ellos escuchen el verdadero Evangelio de Gracia ( recordando quienes somos (page 3))
- Echar a la basura los requerimientos y demandas de perfección, que lejos de crear hijos perfectos, les roban la consciencia de su perfección en Cristo.
- Remover toda falacia enseñada por la religión y principalmente, que entiendan que la justicia de Dios que es retributiva y restitutiva y que no está determinada por la ‘justicia de la Ley‘, que es vengativa y punitiva.
- Darles a conocer la verdad de quien es Dios y de quienes son ellos mismos, de acuerdo a lo que declara el Evangelio de Pablo, que fue el único reservado exclusivamente para los gentiles, y el cual nos da a conocer la rectitud de Dios en Cristo, quien nos vino a hacer a todos los humanos ‘uno’ junto con El, por tanto como El es somos nosotros en este mundo.
Todo lo anterior con el fin de evitar que ninguna doctrina se interponga entre el amor de Dios y ellos y así poder ‘conducirlos’ a una relación sin distancia y sin barreras con su Padre Celestial, y por consiguiente, a su verdadera identidad a través de Jesucristo; al hallar descanso y refugio en Su Padre que los ama, “dejarán de temer y de vivir en pánico y nada les faltará” (Jer. 23:3). Esto será lo que en mi opinión, los protegerá de una vida fuera de su diseño, lejos del amor de su Padre, resultando en una adolescencia y una adultez estable, libre de cualquier tipo de esclavitud, llenos de seguridad en Dios y de fruto de vida y de paz.
Nota que ‘conducir’ está entre comillas, a manera de énfasis, pues es importante recordar que no será a base de reglas, control o manipulación como ellos podrán descansar. El sistema de la Ley nos hará críticos de aquel que no se esfuerza, mucho mas de aquel que alcanza sin esfuerzo; mas bajo el sistema de Dios, esa fue la vida para la que todos fuimos diseñados, descansando y recreándonos en Dios, por su pura Gracia.
¿Cómo podríamos impartir Gracia a nuestros hijos o alumnos adolescentes si no creemos en ella, y solo les impartimos religion y Ley: demandas, reglas, condiciones, consciencia de pecado, culpa, vergüenza, criticismo, juicio y castigo. Será esta carga lo que los haga no solo víctimas sino mas tarde victimarios de otros. Es de estos requerimientos de los que nuestros jóvenes ya están cansados.
Conociendo que el cambio no va a venir de tu manual de instrucciones, ni siquiera de tu revelación, sino de la de ellos, tu labor será similar a la de Pablo, la de hacerles “ver los designios de Dios” para su vida, como Hijos Amados, anhelados, diseñados con un propósito, para que su paso a la siguiente etapa de su vida sea sin ese sentimiento que algo esta mal en ellos, o que no son dignos de amor, o que tienen que cambiar antes de ser aceptados, o tener que agradar a todo el mundo. Tu labor durante ese tiempo tan limitado será simplemente, ser instrumento del Amor de Dios y al ver su gran valor ante Dios quizá podrás ayudarlos a que ellos mismos lo vean. Te invito a no ir por la “Letra”, sino por el Espíritu, que Él te muestre las actividades, las pláticas, el material, etc.
Si tu hijo o tu alumno logran verse totalmente aceptos en el amado por la verdad que tu les hablas acerca de ellos mismos, ellos no van a pasar su vida tratando de cambiar aquello que alguien les hizo ver mal en si mismos, o compitiendo fieramente por llegar a la cima, pues ellos sabrán que ya se encuentran en el lugar mas alto posible, sentados a la diestra del Padre, y todo lo que alcancen sera sin competencia, sin luchar, sin forzarlo, pues su meta no sera ‘el querer alcanzar’, simplemente el Ser, pues en el “en El vivirán y se moverán y existirán, pues son Linaje de El” (mi paráfrasis de Hechos 17:28).
Cierto, aun necesitamos cumplir los requisitos de la sociedad, de tener que cumplir cierta escolaridad, de tener que cumplir con un horario de trabajo, de obtener un ingreso a base de cierto servicio o labor. Sin embargo cuando nuestro valor no está en lo que hacemos sino en quienes somos en Cristo, en lo amados que somos y en lo mucho que podemos amar, esto hace nuestra labor sin esfuerzo, y el alcance de la misma puede ser mayor al lograr ver nuestra completitud y su perfección en Cristo y al ser guiados por su Espíritu, alcanzaremos nuestros sueños por caminos de descanso y no por caminos de Nod.
Así mismo, el que ellos aprendan a ver el mundo y sus habitantes a través de un lente que es de Gracia y no de juicio, les permitirá ser a su vez mas aceptantes o tolerantes del que aun no conoce la Gracia de Dios y verlo aun con compasión y no con temor, que es de donde el tirano y el que no conoce el Amor de Dios obtiene su gratificación.
Caminaran como ovejas en medio de lobos y manejaran serpientes y no los morderán.
Todos tus hijos serán enseñados por el Señor,y grande será el bienestar de tus hijos. En justicia serás establecida. Estarás lejos de la opresión, pues no temerás, y del terror, pues no se acercará a ti. Is. 54:13-14
Esta será la generación del Apocalipsis, es decir, la generación que tenga la revelación de Jesucristo.
Shalom y Gracia en Abundancia.