Jose y su Saco de Muchos Colores
Terminaremos el Capítulo 3 de Gálatas totalmente convencidos de que efectivamente, la Ley de Moisés no es mas relevante. Como muchos cristianos aun no lo saben, o tienden a querer refutarlo, a continuación lo presento directamente de la Escritura, y parafraseado de dos versiones modernas, de la Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy:
Antes de venir la fe, estábamos encerrados bajo la ley, confinados para la fe que había de ser revelada. De manera que la Ley ha venido a ser nuestro guía (tutor, o ayo en la version RV 1960) para conducirnos a Cristo, a fin de que seamos justificados por la fe. Pero ahora que ha venido la fe, ya no estamos bajo el guía, Gal 3:23-25
Del Espejo de la Palabra -(The Mirror) de Francois Du Toit, Versión en Español:
3:23 Estábamos confinados a la ley, guardados en custodia por la influencia contenida, hasta que la revelación de la fe viniera a nuestro rescate.
3:24 La ley estaba actuando como un esclavo que es mandado a ser el guardián de los hijos de su amo, hasta que tuvieran la edad de ir a la escuela de Cristo para encontrar en la fe su justicia revelada y aprobada.
3:25 Ahora que hemos arribado a nuestro destino. El camino profético y las señales e indicadores ya no son útiles. La fe reemplaza al guardián. Ahora que la fe ha venido, la ley ya no es relevante. Gal 3:23-25
Y del Mensaje (The Message):
Hasta el momento en que fuimos lo suficientemente maduros como para responder libremente en fe al Dios vivo, fuimos cuidadosamente rodeados y protegidos por la Ley Mosaica. La ley era como esos tutores griegos, con los que están familiarizados, que escoltan a los niños a la escuela y los protegen del peligro o distracción, asegurándose de que los niños realmente lleguen al lugar al que están destinados. Pero ahora han llegado a su destino: Por la fe en Cristo están en relación directa con Dios. Su bautismo en Cristo no sólo los estaba bañando para prepararlos a un nuevo comienzo, también los estaba vistiendo en su vestuario adulto de la fe – de la Vida de Cristo, el cumplimiento de la promesa original de Dios. 3:23-26
Podrás darte cuenta de quien es el ladrón que vino a robar, matar y destruir, yo solía creer que era el diablo, mas él ya fue derrotado y quedó con la cabeza aplastada; este ladrón es la Ley (o la religión); si no me crees, solo tienes que vivir bajo su poder por algunos años y hacer una cuenta de los daños. Aun cuando andes de noviazgo con la Gracia, mientras sigas casado con La Ley, tu marido Ley no te va a dejar que la Gracia produzca fruto en ti, y mucho menos va a permitir que heredes, ni siquiera que conozcas tu identidad como hijo. Por hoy, terminemos Gálatas 3.
Pues todos ustedes son hijos de Dios mediante la fe en Cristo Jesús. Porque todos los que fueron bautizados en Cristo, de Cristo se han revestido. No hay Judío ni Griego; no hay esclavo ni libre; no hay hombre ni[a] mujer, porque todos son uno en Cristo Jesús. Y si ustedes son de Cristo, entonces son descendencia[b] de Abraham, herederos según la promesa. Gal. 3:27-29 NBLH
En la familia de Cristo no puede haber división en Judío y no Judío, esclavos y libres, hombres y mujeres. Entre nosotros, todos ustedes son iguales. Es decir, todos estamos en una relación común con Jesucristo. También, puesto que ustedes son de la familia de Cristo, entonces ustedes son los famosos herederos “descendientes” de Abrahám y de acuerdo con las promesas del pacto. Gal. 3:28-29 The Message.
3:26 Lo que Jesucristo cree ser verdad acerca de ti es la confirmación final del linaje redimido del hombre. Su fe es la única referencia válida a tu creer.
3:27 ¡Todo el que está en Cristo, está completamente vestido de él! Él es tu nuevo vestido confirmando tu posición de hijo. (¡De ahora en adelante, los días de pañales se terminaron! “¡Nuestra propia justicia cumpliendo la ley se compara a trapos de inmundicia!” Is. 64:6)
3:28 Nada se asemeja a tu vieja identidad como Judío o Gentil, esclavo o libre, varón o mujer, ¡ahora todos están definidos por la unidad en Cristo! ¡Él es su significado y los hace destacar! 3:29 Ya que Cristo es la semilla de la promesa, entonces es solamente en darnos cuenta de nuestra unión con él (en la encarnación) que estamos igualmente relacionados con Abrahám y herederos de la promesa. La fe -y no la carne, nos une a Abrahám. (¡Nosotros heredamos su justicia por la misma fe!) . The Mirror
Que mejor evidencia podemos tener acerca de nuestra identidad de Hijos que esta Escritura. Nuestro linaje es por la fe y no basado “en la carne”. Durante el Capitulo 4 nos convenceremos de ello.
Gracia y Shalom en abundancia.
