Tu Descanso es Su Promesa

Playa Kanapali, Maui

Si tu eres lector de Lino Fino, espero no aburrirte con un tema tan recurrente y repetitivo, mas pensando en aquellos lectores que se topen con este sitio por primera vez,  reiteraré que El hombre no fue diseñado para vivir del sudor de su frente.  El hombre fue creado para vivir descansando en el trabajo de otro.

Te parecerá injusta la idea de trabajar para que otro lo disfrute,   mas ese fue el plan de Dios desde el principio para la corona de su creación-  el hombre, a quien creó después de haber terminado todo su trabajo, el cual  le pareció “bueno” por el simple hecho de que  todo fue diseñado y creado con  la humanidad en mente:  el agua, el oxígeno,    los nutrientes que el hombre necesita se encuentran en la tierra,  la cual observa su misma composición, en sus mismos porcentajes.

Mas la  creencia de la serpiente infectó al hombre con el virus de “Hazlo tu mismo” –  el hombre no creyó que sin Dios nada podría hacer;    al haber cortado su fuente de vida queriendo hacer algo para “encontrarla”,  la perdió. Dios se lo advirtió desde el principio:  “El día que comas de ese árbol morirás”  – éste no sería su castigo, ni una maldición de Dios, éste sería el resultado de “creer” una creencia que le obligaría a adoptar  un diseño artificial, carente de la vida de Dios,   y que lo dejaría pobre, desnudo, lleno de dolor y angustia  mientras moría;  y en efecto, Adan murió el mismo día, considerando que su vida fue  de  930 años,  y que para Dios un día son como mil años.  

Si nosotros viviéramos 100 años, seríamos llamados “longevos”,  más solo serían 2.4 horas   en el reloj de Dios. Aun si a base de esfuerzo e inteligencia lográramos una vida llena de  gloria y hermosura  para nosotros y nuestros hijos,  nuestra vida solo sería tan corta como una obra teatral  que al terminarse nos despertaría a una eternidad sin Dios, algo innecesario,  cuando podemos vivir en descanso eternamente por el trabajo consumado de otro – Jesucristo. 

  Él dijo,   “Vengan a mi los que están trabajados y cansados y yo los haré descansar”,  Él nos ha redimido de tener que vivir de  nuestro esfuerzo:

 Cristo nos redimió de la maldición de la ley al hacerse maldición por nosotros (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero),  para que la bendición de Abraham llegara por Cristo Jesús a los gentiles, a fin de que recibamos la promesa del Espíritu por medio de la fe.

Gal. 3:13-14

(traducido de la versión The Message)

Cristo nos redimió de esa vida  autodestructiva y maldecida al absorberla por completo en sí mismo. ¿Recuerdas la Escritura que dice: “Maldito todo el que es colgado en un árbol”? Eso es lo que ocurrió cuando Jesús fue clavado en la cruz: Se convirtió en una maldición, y al mismo tiempo disolvió la maldición. Y ahora, debido a eso, el aire ha sido  despejado y podemos ver que la bendición de Abraham está presente y disponible también para los no-Judios. Todos somos capaces de recibir la vida de Dios, su Espíritu, en y con nosotros al creerlo, -justo en la forma en que Abraham la recibió. 

Gal. 13-14  

 Cristo nos redimió de la maldición como consecuencia de nuestro fallo al guardar la ley. En su cruz él concentró la maldición de la raza humana sobre sí mismo. Al entregarse a sí mismo a la muerte, él absorbió y disolvió el horror de la maldición en su propia persona. La escritura declara que cualquiera que es colgado en un madero representa la maldición. (Deut.21:23)   Este acto de Cristo conlleva la ¹bendición de Abraham sobre los ²Gentiles! Ahora estamos libres para recibir la bendición del Espíritu.

(¹La Justicia por la fe de Dios es el logro de Cristo, y no una recompensa a nuestro comportamiento. ¡En la obediencia de Cristo, Deuteronomio 28 quedó obsoleto! (Rom.5:18; Ef.1:3) ²Ethnos, Las naciones no Judías) Gal. 3:13-14.

Toit, by Francois du. The Mirror / El Espejo de la Palabra: Traducción en Español.

Así es amado(a), si tu has creído el verdadero Evangelio de Gracia,  tu vida ha sido redimida de la maldición de la Ley,  de tener una vida de dolor, esfuerzo y angustia, por tanto volver a la Ley es desechar lo que Él ha hecho.  Dios no solo es tu hacedor y tu redentor, Él es tu Padre,  quien te hace florecer y fructificar al darte la  revelación, a través de su Espíritu Santo, de quién es Él y de  lo que tú eres en Él.  Él es el que te da tu fuerza y tu habilidad, tu sabiduría y tu creatividad, tu gozo y tu paz y mucho más:

Él es el que perdona todas tus iniquidades,
el que sana todas tus enfermedades;
el que rescata de la fosa tu vida,
el que te corona de bondad y compasión;
el que colma de bienes tus años,
para que tu juventud se renueve como el águila.

 ESeñor hace justicia, y juicios a favor de todos los oprimidos. Salmo 103:3-6

Cuando abrazas esto que Dios arregló en tu vida, el descanso será el resultado pues ya no hay más por hacer mas que creer que “Consumado es”; será a través de esta fe cómo vivamos los mayores logros y no podremos evitar reflejar su gloria para toda la eternidad.

Aclaro que descansar en el trabajo consumado de Jesucristo no significa dejar de trabajar,  mas con manos bendecidas y mente libre, sin opresión y angustia en tu corazón, tu vida será de paz y bienestar. Esa es la promesa de Dios para el que cree el Evangelio de Gracia, que revela la rectitud/justicia de Dios en Cristo; esto es lo que significa “establecernos en justicia” y  esta promesa abarca a tus hijos.  Léela tu mismo en Isaias 54:13-17 y te espero la próxima semana.

Shalom

Series Navigation<< Gloria por Su GraciaPor Su Pura Gracia >>